Bahía Blanca, 15 de noviembre de 2011.
Rápidamente
murió
el yogur
desamparado
por las sombras
¿Se va a quedar
mirando como
flamas y horas
serán
huérfanas
del tiempo?
Así que
para que avance
revisé
los parches
de su armadura
(todos sudamos
inmortalidad
desde el costado).
Porque
sin querer,
la sorpresa
engendró
a la precaución.
¿Se marcha?
¡Mucha mierda, entonces!
Pero no olvide:
incluso
la precaución
teme
a la naturaleza.
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